La Viña: sabor moruno en Zaragoza
Pequeño local en la calle Jordán de Urriés; bajando por la calle Don Jaime, o calle San Gil, es la última calle a la derecha. Lo atiende un chico marroquí que es una delicia de gente. No lleva tanto tiempo abierto como sus vecinos de zona y hace ya tiempo que se ha puesto de moda. Y es que es realmente bueno y barato.
Vermutera mayor y yo vamos mucho por esa zona, por el Belanche y tal, desde que yo era pequeña, y alguien que conocemos, y también está por allí todos los días, un parroquiano nivel pro, nos dijo, «entrar aquí que acaba de abrir este barcico con unas bravas baraticas mu buenas». Ni tres segundos tardamos en entrar. Y efectivamente, unas bravas mu buenas!! Y nos marchamos.
¿Cómo son las bravas? Lo principal es que están, casi siempre, recién hechas. Y digo casi, porque sólo una de las tropecientas veces que he ido, nos las sirvió recalentadas. Tienes dos salsas a elegir, aragonesa y de la casa, con su cestico de pan, por 2€, señores, 2€, y te vas a casa merendao.
Al tiempo, estando por allí otra vez, este mismo hombre nos dijo, «entrar y pedir la berenjena, ya verís qué rica». Y es que, por aquel entonces, no la tenía ni anunciada, llevaba poco tiempo abierto. Es como una droga, esa berenjena, diablo vestido de ángel (como dirían Los Calis), te atrapa. Viene cortada en tiras largas formando una torreta, con una deliciosa salsa con miel resbalando. Crujiente, sabrosa… de untar el dedo por el plato. Por 1,90€ toda tuya.
Si con eso no te basta, los pinchos morunos están tremendos también: brochetas de ternasco, pavo o pollo recién hechas en la plancha.
Hubo un tiempo que La Viña fue un secreto, los que lo conocíamos nos lo guardábamos para nosotros como un tesoro escondido, pero poco a poco alguien se fue de la lengua…
¿Volveremos? Mil y una veces.
Bar La Viña. Jordán de Urriés, 5. Zaragoza. El Casco Antiguo.