Cómo hacer Mayonesa Casera
Receta de mayonesa casera: Queridos taperos, hoy se nos ha ocurrido ponernos a hablar de la que quizá sea la reina de las salsas en nuestros centros de peregrinación habituales, y en España en general.
Es una de las grandes ya que combina con casi todo, y sin ella muchas de las grandes tapas y raciones de nuestro país nunca hubieran existido.
Ya sin duda y con esta introducción, no cabe duda de que hablamos de la Mayonesa para unos y la Mahonesa para otros, y para nosotros, que somos de donde somos, la gran ¡MAÑOnesa!
Cómo hacer mahonesa casera
Toma nota de nuestra receta, te enseñamos cómo hacer mayonesa casera (y que no se corte).
En cada casa, cada maestrillo tiene su librillo, y se hace de múltiples maneras: hay a quien le gusta hacerla solo con AOVE, otros utilizan girasol, otros mezclan los dos aceites. Hay gente que hecha un huevo, otros dos, con leche, con ajo, sin ajo… mucho lío ¿no?
Ya sabemos todos que uno de los principales problemas a los que nos enfrentamos cuando vamos a hacer mayonesa, es que se corta: no liga el aceite con el huevo, y no espesa. O sea, desastre. Y vuelta a empezar.
A lo largo del tiempo, han ido surgiendo muchos remedios para que no se corte la mayonesa, que si echar un huevo más, que si ponerle patata o echar un poco de agua tibia… no sabemos si serán ciertos o no. Lo que sí sabemos es que con esta receta, NO SE CORTA.
Nosotros en casa hacemos la mayonesa de una manera rápida y sencilla, y sale riquísima. Nos gusta bastante espesa, que tenga densidad y con un toque de ajo para darle un poco de rock & roll. Usamos aceite de girasol ya que desde nuestra humilde opinión el de oliva es demasiado fuerte para esto.
Una vez que ya sabes cómo va a salir, nos ponemos al lío. Estos son los ingredientes:
Pasos para hacer Mayonesa Casera
La elaboración es fácil:
⇒ Primero lavamos la cáscara del huevo con vinagre: el ácido desinfecta y mata a la salmonella.
⇒ En un vaso mezclador ponemos el aceite, la sal, el ajo sin el germen, un chorrito de limón o de vinagre al gusto y el huevo. Metemos la batidora sin accionar y la ponemos abajo del todo.
⇒ Desde esta posición la accionamos a máxima potencia y esperamos: veremos cómo la mezcla comienza a coger densidad. Cuando veamos que más de la mitad del vaso ya está cuajado comenzamos a subir poco a poco. La salsa comenzará a ligarse completamente.
⇒ Sin prisa pero sin pausa, iremos subiendo y bajando la batidora hasta alcanzar el punto de consistencia deseado.
Como veis, el tema no tiene ninguna complicación y la verdad es que está buenísima. Añadidla a unas buenas bravas con bien de picante o completa tu ensaladilla casera con un punto rico y toque de ajo.
Efectivamente así sale riquísima y estoy de acuerdo en que es difícil que se corte.
De todas formas te cojo la palabra y, de forma inmediata, tendremos que tomar unas bravas